Gisela Derpic | ATANDO CABOS
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ATANDO CABOS

ATANDO CABOS

La verdad es compleja y complejo es conocerla. Tratándose del pasado, los historiadores la alcanzan en fragmentos, comprendiéndola y explicándola una y otra vez. Su tarea es inconclusa y ellos atan cabos. Sí, unen datos para responder preguntas. Tratándose del presente es igual, con un problema adicional: se intenta alcanzar, comprender y explicar la verdad mientras sucede, lo cual envuelve a los estudiosos y analistas, afectando sus posibilidades de conocimiento y su previsión del futuro. Con mayor razón ellos atan cabos, bajo riesgo fundado de error. Lo asumo.

No cabe duda de que el foco de atención desde 2022 han sido las riñas y peleas entre masistas de niveles bajos, medios y altos, vistos por ingenuos y desesperados como ruptura interna del oficialismo. Por ello, la crisis económica, institucional, de seguridad ciudadana, de derechos humanos, ambiental y energética, señales del hundimiento del país en una debacle general de consumación en cámara lenta con nosotros aclimatándonos rumbo a cocinarnos, ha dejado de ser prioridad. En otras palabras, la sucesión de capítulos de un culebrón de poca monta y muy mal gusto, ofensa a la decencia y a la inteligencia, ha resultado un medio de distracción eficaz pues ocupa titulares y noticias, memes y videos, dimes y diretes en todas las colas, en micros y taxis, en sobremesas y fiestas. Ha llegado a envolver a algunos que ocupan curules en el legislativo en nombre de la oposición, quienes han encontrado en tal show mediático una buena excusa para salir en público mostrando su falta de capacidad y de experiencia política al tomar partido por el jefe de uno de los bandos en disputa atacando al otro, contribuyendo a generar la imagen de que hay un bueno y un malo entre ellos, cuando lo cierto es que son iguales, gemelos engendrados por la misma semilla y paridos por la misma madre: el socialismo del siglo XXI.

Tal despiste explica en buena medida el resultado de una encuesta aplicada por Diagnosis en este mes. A la pregunta “¿Quién es el principal opositor del Gobierno?”, el 43% identificó al ala evista del MAS; el 19% al Comité pro Santa Cruz; el 17% dijo que no sabe o no responde: el 9% a la alianza opositora Creemos; el 8 % a Comunidad Ciudadana (CC) y el 3% a los medios de comunicación”. Menudo lío para los militantes de la democracia que, ahora sí, nos hemos quedado en la orfandad, aunque parezca mentira dado que desde 2006 es la primera vez que se llegó a contar con un número importante de representantes no masistas en el legislativo, lo cual confirma que “el tamaño no importa”.

Las cuestiones del momento son si el MAS está dividido o no; si está abriéndose una ventana de oportunidad para la oposición; si las esperanzas del final del populismo autoritario que surgen ante los insultos, amenazas y difamaciones entre sectores oficialistas son fundadas; si estamos en las vísperas de derrotarlo en las urnas… Despejemos la hojarasca para ver que hay por debajo de ella. Esto es: atemos cabos.

¿A cuántos ex dignatarios de gobierno entre 2006 y 2019 han acusado los voceros del supuesto bando del gobierno actual de cometer delitos? A muchos. ¿Alguno de ellos está siendo investigado o procesado? No. ¿Alguno está ya detenido o condenado? Ninguno.

¿Con que dinero se mantiene la radio Kawsachun Coca? Con el de uno y otro lado. El Deber informó el 22/03/2022: “Andrónico Rodríguez afirmó que cada afiliado a las Seis Federaciones del Trópico de Cochabamba aporta 50 centavos al mes. En 2022, el Ministerio de la Presidencia destinó Bs 300.000 a la emisora para el pase de publicidad estatal. ¿Quién insulta y acusa a Arce, su hijo y sus ministros en esa radio? El fugado. ¿Se ha cortado el apoyo económico financiero del estado a esa radio? No. ¿Se ha tomado acción legal en contra? Tampoco.

¿Se han diferenciado las posiciones de los supuestos bandos respecto de la mentira del golpe de estado de 2019? No. ¿El fugado ha reclamado su derecho a retornar a la silla de su añorada casa del pueblo en la plaza Murillo porque hubo golpe? No. ¿Ha argumentado que Arce es un presidente ilegal porque hubo golpe? No. Al contrario, actúan de consuno, hermanados en los abusos de poder vulnerando los derechos humanos con ya más de 300 presos políticos a la fecha, víctimas de esa impostura.

Por ahora, la sangre no ha llegado al río porque parece que no hay sangre. Tan sólo rabietas por angurrias y broncas personales por controlar el poder y la corrupción. Cuando llegue el momento, “yo te estimo hermanito querido” y listo. Los alcahuetes caribeños harán su parte por interés directo.  Y si estoy equivocada y la pelea es a muerte, no será una oportunidad para ganar elecciones y ser gobierno mientras se mantengan los mecanismos de fraude y no haya una real alternativa política que practique democracia interna, con liderazgo renovado y estructura que cohesione adherentes en todo el país en torno a principios claros, con capacidad y ganas de hacer campaña y control electoral. En suma, con perfil de ganador.

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